lunes, 18 de enero de 2016

Tarantino trae mierda guay...



Oh si, Tarantino ha llegado, con su mierda guay , mierda de calidad y todos recibimos con ansias coprófilas la susodicha mierda, como si de maná lloviendo del cielo fuera.

Y yo me incluyo
Ayer fui a ver en la Gran pantalla la repetida-hasta-la-saciedad octava película de Quentin Tarantino. Iba con un enorme cubeto de palomitas sabor salsa ranchera (el tremendo olor era tal que recordaba al gas naranja usado en Vietnam, osea un aroma de mi agrado), unas ansias brutales y la molesta compañía de un quejicoso caballero de cráneo muy pulido enfrente mía, que no paraba de quejarse de mi deglutir palomitero que acostumbro a tener como preludio a la película.

Tras solucionar las quejas del caballero reduciendo su cráneo a un mayor nivel de atomización con usando mi calzado y de forma discreta, pude contemplar cómo la pantalla se encendía, se sucedía una serie de anuncios cochambrosos para después comenzar con la peli.

Aviso: no quiero spoilear nada, pero tal vez veas un par de detallitos sobre la peli, pero son pequeñitos, chiquitiiiiitos, nada que no leas en la cartelera del cine. Por lo demás me he asegurado de no enseñar ningún elemento que destripe la trama entera, no te van a estropear la experiencia. Así que sigo...

Lo primero que veo son unos hermosos paisajes montañosos típicos de la zona de los Grandes Lagos de Norteamérica  donde  contemplo nieve por todos lados, y de esa espesa nieve surje un carruaje el cual se detiene ante una pila de cadáveres. Sobre dicha pila de cadáveres, se halla sentado, un negro con chaqueta azúl de oficial de caballería mientras fuma en su pipa lo que sea (opio, o carne recogida de la pila de cádaveres por qué no).

El negro alza la vista, descubriendo un rostro que en efecto es el de Samuel L. Jackson, y pide sitio en el carruaje.

Esta secuencia de escenas ya es un presagio: la peli es cojonuda porque sus personajes son cojonudos, y más si los pones en pilas de cadáveres. Qué coño, las pilas de cadáveres ya son buena señal de película exitosa (y si no mira todas las pelis del Holocausto premiadas).

El resto de la película es  mitad presentación  de los personajes (una panda de cabrones todos ellos) y después verles interactuar como en una novela de Agatha Christie, todos los personajes encerrados en un lugar atrapados por un clima desfavorable o que el asesino de turno anda suelto o ambas cosas como en Los ocho odiosos pero con resultados tremendamente graciosos.

y para que te hagas una idea del plantel de personajes, tenemos desde un cazarrecompensas engreído hasta un general sureño confederado (JODER UN GENERAL CONFEDERADO, ¿QUÉ CLASE DE PERSONAJE PUEDE SUPERAR ESO?), pasando por un paleto aspirante a sheriff, una rea de muerte y sin olvidarnos claro está de nuestro amigo el oficial de caballería negro. 

Por supuesto contaría más cosas sobre la peli pero a pesar que me chifla destripar pelis y sobretodo ponerlas a parir pero ah, me ha gustado, tengo en enorme estima a Quentin Tarantino y además la principal baza de la película es la sorpresa. Así que ya podéis ir yendo a verla en el cine porque es la polla

Abre tu boca de exclamación y deja que Tarantino te llegue a lo más hondo...